martes, 16 de enero de 2018

EL REY DE LA POLCA


Directo al número 1 de los timos

Jack Black está ahora en las carteleras con Jumanji Bienvenidos a la Jungla con Dwayne Johnson, la cinta de Jake Kasdan está funcionando muy bien (a pesar que tenía un cierto halo de proyecto maldito). Ahora el protagonista de Escuela de rock (¿Se acuerdan de su horrible doblaje?) regresa con un nuevo trabajo, El rey de la polca, un filme basado en un hecho real, lo que supone su debut en Netflix. A Black le acompaña el inclasificable Jason Schwartzman en el reparto. Dirigen a pachas el filme Maya Forbes y Wallace Wolodarsky además de escribir el libreto.

La cinta está ambientada en los años 90, nos narra la vida de Jan Lewan, un tipo de origen polaco que llegó a Estados Unidos  y se convirtió en el rey de la polca en Pennsylvania. Ataviado de deudas, decidió que la mejor forma de hacerse con dinero, era timando a sus fans (mayormente jubilados), con una estafa piramidal.

A pesar de tratarse de un biopic y del tema que tratan, los directores han apostado por darle un tono amable aderezado de un humor bastante blanco que le queda resultón y acorde al protagonista. El filme es una cinta de producción modesta, sin grandes alardes presupuestarios (tampoco es que la historia lo necesite).

Donde habría que destacar el buen hacer de su protagonista, Black no solo le pone el rostro a Lewan sino que le pone voz cuando tiene que cantar, siempre con una sonrisa en la cara a pesar de los problemas que tiene o tener que aguantar a su suegra, empeñada en que su yerno no trama nada limpio.

Problema que presenta la cinta, en ocasiones se hace repetitiva, cuando Jan se ve en una encrucijada siempre aparecen la simpática pareja de ancianitos que le reclaman su dinero y éste les vuelve a engañar hasta en tres ocasiones, dejando una sensación que dura más de sus 95 minutos.

Con todo esto, El rey de la polca es una cinta que aunque no sea sobresaliente, entretiene a las mil maravilla a ritmo de la música que interpreta su protagonista.

Curiosidades

El filme se rodó en Rhode Island.

La película está basada en el libro Jan Lewan's life is currently in the works de Melinda Stanislawczyk y en el documental The Man Who Would Be Polka King de Joshua Brown y John Mikulak.

La banda sonora del filme fue grabada por los miembros original de la Jan Lewan Orquesta.

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